El Nacional demostró que a pesar de mejorar ostensiblemente desde la época de Octavio Zambrano, aún le falta. Le falta profundidad, le falta llegada. Se ha mejorado en defensa, se ha mejorado en mediocampo. El equipo toca más la pelota, busca el arco rival. Pero hasta ahí.
El triunfo
frente a Mushuc Runa nos mostró la cara más visible de los rojos. Control,
toque, proyección por las bandas. Pero en ataque nos cuesta, nos sigue costando
poder meter presión y llegada clara. Los ambateños casi logran lo mismo que el
Deportivo Quito: cortar el juego por las bandas, y ahí entonces dejarnos sin
muchas opciones de ataque.
El juego
combinado de Lara, con Pabón, Palacios y Preciado, como lo planteó Insúa, puede
ser peligroso, puede marcar, pero no logra esa fluidez, esa contundencia que
necesitamos arriba. Hay que admitir que Mushuc Runa no fue un equipo deslotado
que nos complicó la defensa, pero si tenemos problemas para anotar goles a los
ambateños, ¿qué pasará con los equipos grandes?
Hay varias
reflexiones que se pueden sacar en limpio del partido anterior. Primera:
podemos ganar a los equipos de media para abajo. Dos: falta ataque,
contundencia. Tres: la mejoría del equipo frente a la era Zambrano es visible.
No podemos
negar a la hinchada que al equipo le falta. Que no quedamos satisfechos. Que
nos sigue pareciendo poco ganar al Aucas y al Mushuc, si lo comparamos con las
derrotas frente a Liga y al Quito.
Pero
analicemos algo. En ambos partidos que perdimos se resolvió con un gol en
nuestra contra y luego ambos cuadros se fueron a la defensa. Saben que nuestro
problema en este año es ser protagonistas en nuestra propia cancha. Lo conocen.
Y eso nos complica.
Siempre me
preguntaremos el porqué Insúa no arriesga con dos delanteros netos en el área.
Tal vez por ahí… Tal vez con la inclusión de Chalá, no sabemos qué pasa con
Bagui… Y lo del “chupete” Samaniego sigue siendo una incógnita.
Ganar nos
debe dar gusto. Debe ser reconocido porque no es fácil. Eso se lo debemos a los
jugadores. Pero siempre hay espacio para mejorar. Siempre habrá en la hinchada
roja esa sensación de querer más.
Este fin de
semana nos espera otro duelo de vista contra Deportivo Cuenca, lo ideal será
rescatar unos puntos de tierras morlacas, pero no es una tarea fácil, además
que siguiente semana el encuentro contra Barcelona, los mejor seria sumar en
los dos encuentros pero sin la hinchada que apoye el camino es más difícil.